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José Mujica y Tabaré Vásquez

José "Pepe" Mujica y Tabaré Vásquez. Foto: Nuevodiarioweb.

 

23 de marzo de 2015 | COLUMNA |

Mi modesta opinión sobre el Uruguay de hoy, Latinoamérica y el imperialismo

Mi modesta opinión sobre el Uruguay de hoy, Latinoamérica y el imperialismo 2015

 

Por: Ignacio Sosa da Costa

 

Para empezar recordemos que el Frente Amplio no es ni fue creado para ser un frente revolucionario, se creó como un frente progresista (reformista si se prefiere esa palabra) para enfrentar la aguda crisis social, política y económica que el Uruguay sufría ya desde finales de los años 50.

El Frente fue la unión de todos los orientales honestos que buscaron una salida a esa situación de caos y violencia a la que llevaron al país la rosca oligárquica y los partidos tradicionales corruptos. Fue cuando por primera vez la izquierda uruguaya pasó de ser la eterna opositora a poder ser una opción realista, una posibilidad de cambio. Esa intención del pueblo de querer tomar la dirección de su destino en sus propias manos llevó a que el imperialismo intentara apagar la llama del Frente con violencia, con la dictadura.

Hoy, en el tercer gobierno frenteamplista el Uruguay se encuentra en su mejor momento económico y social de hace seis décadas.

¿Estamos tocando el cielo con las manos? ¡Por supuesto que no! Y nunca lo haremos, porque eso no existe. Aún hay pobreza, hay niños creciendo en los cantegriles, hay desigualdad social, racial y de género. Pero estamos caminando como nunca antes. Claro que la derecha por interés propio no va a reconocer los logros (serán malditos egoístas, ¡pero tontos no son!). Pero y los otros, los que "nos corren por la izquierda", ¿que tampoco le reconocen ningún avance al Frente? Bue, como dijo Fidel: "Esos intoxicados de "ideologismo" ¡que inconscientemente se convierten en aliados del imperialismo!"

¿Significa que nos debemos sentir satisfechos y conformes con lo logrado por en frente hasta ahora? ¡De ninguna manera! La clase trabajadora, a través de sus organizaciones, el estudiantado, y el PCU deben ser celosos guardianes de las transformaciones, y si es necesario ¡"empujar" al Frente pa´delante! El Frente es justamente eso: un frente, y está compuesto de distintas organizaciones políticas e ideologías.

Por el momento (y en el horizonte del futuro cercano) es la única alternativa en la práctica realizable para el Uruguay en este mundo del 2015. Digamos que el país va por buen camino, ¿podemos sentirnos seguros? NO. Porque el Uruguay aunque tenga el mejor nivel de vida de Latinoamérica igual sigue siendo un país subdesarrollado y con una base económica dependiente.

Nos falta mucho por lograr. ¡El Uruguay es, siempre ha sido y será un país latinoamericano!

Latinoamérica ha vivido una década de avances económicos, sociales y políticos sin precedentes en la historia, pero no podemos ni cantar victoria ni decirnos:"Bue, ¡lo logramos!".

Lejos de eso, es justamente cuando estamos logrando más, que el imperialismo se pone más peligroso. ¡El imperialismo (los yanquis y la U.E.) jamás nos van a regalar nada ni van a voluntariamente soltar sus garras de esta gallina de los huevos de oro que es Latinoamérica!

A la vista está su política de desestabilización en varios de nuestros países hermanos. Inestabilidad muchas veces creada por errores propios, pero a lo cual los yanquis con mucho gusto le echan más nafta el fuego para incendiarnos.

Pienso que no nos compete el ponernos a juzgar los problemas internos de nuestros países hermanos (en todo caso dialogar respetuosamente y francamente con ellos), como tampoco me parecería ni acertado ni inteligente que ellos se pusiesen a opinar del Uruguay sin conocer nuestra historia y realidad.

¡Pero tenemos que estar conscientes de que el imperialismo ya está en una contraofensiva en contra de las fuerzas progresistas del continente! Y es lógico que lo hagan, ya que nuestra libertad es una pérdida para ellos. Esperarse que nos dejaran seguir avanzando es seguir creyendo en los reyes magos (No se lo cuenten a los niños pero en realidad:...son los papás).

Aún nuestros países no tiene mecanismos fuertes y desarrollados como para poder enfrentar esa agresión de una forma efectiva, la UNASUR es una buena idea, pero que todavía sigue siendo eso: una buena idea.

¡Estoy convencido de que el imperialismo (hoy tambaleante en su poder económico) no dudará en buscar y encontrar justificaciones para hasta usar la fuerza militar, con tal de mantenernos un tiempo más subyugados!

Pero qué hacer entonces, ¿mirar con tristeza como nos abortan los sueños, una vez más? NO. Lo que nuestros países no pueden lograr como instituciones en este mundo capitalista (el único que existe por el momento) lo pueden lograr los pueblos.

¡Que el decir:"Si agreden a Venezuela agreden a TODA América Latina" no sea solo una consigna! ¡Que las organizaciones obreras, estudiantiles, campesinas y populares del continente declaren alerta general y que en serio se replanteé la posibilidad permanente de brigadas internacionalistas por Latinoamérica!

Cuando la triste guerra civil española las brigadas internacionales no fueron ninguna utopía sino una realidad, aunque todos los gobiernos del mundo trataron de prohibirlo e impedirlo.

Hoy están las condiciones para desarrollar una conciencia latinoamericanista militante que va más allá de los gobiernos, el que esa voluntad solidaria de los pueblos de apoyarse y defenderse mutuamente con los métodos que sean necesarios, sea impulsada y enunciada públicamente
representará un problema serio para el imperialismo ya que ni siquiera podría acusar a un gobierno.

 

 


 
 
 
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