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Rovana Plumb  Annika Strandhäll y Åsa Regnér
La ministra rumana, Rovana Plumb, y las ministras suecas Annika Strandhäll y Åsa Regnér, durante la rueda de prensa del viernes pasado. Foto: Sveriges Radio.
 

29 de enero de 2015 |SUECIA |

Rovana Plumb: "En Rumania no se discrimina a los romaníes"

ESTOCOLMO: La semana pasada se reunieron las ministras suecas de Asuntos Sociales, Annika Strandhäll y Åsa Regnér, con su colega rumana, Rovana Plumb, con el fin de discutir la situación de los migrantes rumanos en Suecia.

Las tres ministras comunicaron más tarde, en una conferencia de prensa, que habían tenido "conversaciones constructivas", y manifestaron el deseo de seguir trabajando en conjunto, lo cual se demostró en un Memorandum of understanding (MoU), el que será suscrito por ambos países en marzo del año en curso.

"Nuestro principal objetivo es lograr la integración social de la población romaní, y tenemos una nueva estrategia para lograr este objetivo", dijo Plumb. No obstante, al ser preguntada sobre la discriminación de los romaníes en su país, la ministra negó que esta existiera.


Por: Marisol Aliaga

 

Cuando la temperatura se acerca a los 10 grados bajo cero y el manto blanco se apodera del país, la situación de los mendigos en las calles de las principales ciudades del país se hacer cada vez más insostenible.

Las iglesias, junto a organizaciones sin fines de lucro y voluntarios hacen lo posible por ofrecer albergue a estos ciudadanos europeos quienes, al vivir en la pobreza extrema en su país, Rumania, prefieren venirse a Suecia a mendigar en las calles con el fin de enviar dinero a sus familiares y de mantenerse ellos mismos, en la más completa indigencia.

La presencia de los mendigos en las principales ciudades suecas ha despertado gran polémica, y mientras que algunos sostienen que hay que demostrar humanidad, la reacción de otros es el desprecio, incluso el odio. El año pasado falleció un hombre rumano, padre de dos hijos, debido a las heridas que sufriera en un incendio que destruyó la carpa en que habitaba, en uno de los suburbios de Estocolmo. Se cree que el incendio fue ocasionado.

El viernes recién pasado, unas diez personas que dormían en una furgoneta en un estacionamiento de la localidad de Perstorp, en Skåne, al sur de Suecia, fueron agredidas por individuos que lanzaron piedras al vehículo. Una mujer recibió una piedra en la cabeza y un hombre que fuera apaleado tuvo que ser trasladado al servicio de urgencia más cercano.


En distintos puntos de Estocolmo se han reportado incidentes.
Un comerciante que le tiró un balde de agua a una mujer no sólo una, sino tres veces, argumentó más tarde que "lo había hecho sin querer". En numerosos lugares los mendigos han sido maltratados, o visto sus campamentos destruidos por la policía junto a la Ejecutoría Fiscal, quienes han estado plenamente conscientes de que esta no es la solución al problema.

En varias ocasiones los municipios contrataron buses que los llevaron de vuelta a Rumania. Sin embargo al cabo de un tiempo estaban de vuelta. Cuando no se tiene nada, las expectativas son bajas. La gran mayoría de los migrantes rumanos en Suecia se sienten bien de estar aquí, a pesar de no tener ni trabajo ni hogar y de vivir en la miseria. "En Rumania estamos peor", dicen.

Es por esto que la visita de la ministra Plumb se vio como una esperanza, ante un problema que se viene arrastrando durante largo tiempo y que al parecer Suecia intenta resolver no de la forma de su vecino Noruega, donde se prohibirá la mendicidad, o de otros países europeos, que han tomado medidas similares. La ministra Åsa Regnér declaró en el programa Agenda, de la televisión estatal, SVT, que el prohibir la mendicidad es prohibir la pobreza, y esto no resuelve ningún problema cuando se trata de la vulnerabilidad de los necesitados.

 

"Conversaciones constructivas"

Rovana Plumb es la ministra encargada de las carteras del empleo, la familia, la seguridad social y ancianidad, en Rumania. Ella se encontró el pasado viernes con sus colegas suecas Annika Strandhäll, a cargo de la seguridad social, y Åsa Regner, encargada de temas de la infancia, de la tercera edad y de equidad de género, para tratar la situación de los mendigos rumanos en Suecia.

Después de la reunión, se celebró una conferencia de prensa en la cual las ministras anunciaron que habían tenido "conversaciones constructivas" y habían acordado seguir trabajando juntas. En la cumbre de la Unión Europea, el 9 de marzo, los dos países suscribirán un Memorando de Entendimiento (MoU) con el fin de continuar con la colaboración en conjunto.

Vale decir que esta no es la primera vez que Suecia intenta un acercamiento con Rumania, con el fin de mejorar la situación de los mendigos rumanos. El año pasado, la entonces Ministra de Democracia, Birgitta Ohlsson, del Partido Popular, propuso la creación de un grupo de expertos, para asegurar que el dinero de los fondos de la Unión Europea destinados a la integración de la comunidad romaní dentro de Europa favoreciera a este vulnerable grupo.

 

Se calcula que unos 2.000 rumanos romaníes se encuentran en Suecia en situación de mendigos. En Rumania, alrededor de dos millones de romaníes viven en condiciones de extrema pobreza. En vista de ello, y pensando en la urgencia de mejorar la calidad de vida y la integración de la población europea romaní, la UE destinó, entre el 2007 al 2013, 184 mil millones de coronas para el desarrollo de Rumania, de los cuales 32 irían a medidas sociales para mejorar las condiciones de los más necesitados. (Fuente: Aftonbladet).

Según el vespertino Aftonbladet, Rumania ha usado solamente un 20% de estos fondos, lo cual ha sido condenado por, entre otros, Suecia, quien se ha ofrecido apoyar a Rumania para solicitar y sacar el mejor provecho de los fondos estructurales de la UE.

Y las conversaciones no han sido siempre fáciles. El año pasado, el gobierno rumano se negó a que una comisión de la UE participara en el grupo de expertos propuesto por Suecia, y las negociaciones se rompieron.

La ministra Ohlsson manifestó entonces a la prensa que estaba "enojada y triste", declaraciones que fueron duramente criticadas por el gobierno rumano, que calificó a Ohlsson de "injusta y poco diplomática".

 

Plumb: "En Rumania no existe la discriminación"

Es por esto que la visita de la ministra rumana se vio como una nueva apertura. Aunque también puso de manifiesto la percepción de Rumania respecto a su población romaní.

- Vamos a crear un marco respecto a cómo compartiremos experiencias sobre medidas exitosas, dijo Plumb, sonriente, en la conferencia de prensa en Rosenbad, el viernes pasado.

Se mostró contenta de haberse reunido también con representantes de la comunidad rumana en Suecia, a quienes quiso felicitar por estar "bien integrados a la sociedad sueca", cosa de la cual se sentía orgullosa.

Sin mencionar a los mendigos rumanos. No obstante, los periodistas presentes no dejaron pasar la oportunidad. Ante la pregunta del corresponsal de TT, de si tenía planeado visitar algún campamento romaní, o conversar con los mendigos (no necesitaba caminar muchos metros para encontrarse con ellos), Plumb replicó que era una "visita breve, tal vez en otra ocasión, en el futuro, para ver cuál es la realidad".

¿Y cuál es su percepción sobre la realidad de estas personas? Contrarrestó el corresponsal, a lo cual la ministra, visiblemente molesta, respondió escuetamente:

- Yo creo que necesitan ayuda.

Sin especificar más detalles. Entonces, la pregunta siguiente fue de si ella pensaba que este trabajo a alto nivel lograría disminuir el número de mendigos en las calles.

- Necesitan ayuda. Este es un punto de partida para seguir la colaboración en pos de resolver los problemas del grupo vulnerable de ciudadanos rumanos en Suecia. Ya existen proyectos, dentro de la Unión Europea, para lograr la inclusión social, dijo Plumb.

Pero su desagrado aumentó más, cuando el reportero de la redacción en rumano de Sveriges Radio (Radio Suecia), se refirió a los prejuicios existentes en Rumania respecto a la población romaní, y quiso saber si el gobierno pensaba hacer algo al respecto.

- En Rumania no existe la discriminación, respondió la ministra, y de la sonrisa inicial ya no quedaban huellas.

Ante la palabra "prejuicios" manifestó no saber qué quería decir el reportero.

En Rumania algunos dicen que los romaníes no quieren trabajar, que no quieren vivir en casas… ¿cómo va a cambiar Ud. esos prejuicios en contra el pueblo romaní?

Luego de pensarlo, Plumb contestó:

- El plan de trabajo y la estrategia que hemos adoptado y vamos a implantar será una herramienta importante para ayudar a los grupos vulnerables.

Sin explicar ni cómo ni cuándo.

El reportero quiso saber entonces si el gobierno rumano, al igual que el sueco, elaboraría un "Libro blanco". ¿En Rumania, pueden Uds. ir al pasado y darse cuenta de lo que se ha hecho con el pueblo romaní, cosa de que se pueda avanzar al respecto?, inquirió.

El "Libro blanco" (Vitboken) es un documento en el cual se recopiló y documentó la discriminación de cientos de años que ha sufrido la población romaní en Suecia. "Sólo se puede avanzar si se conoce la historia", dijo el entonces Ministro de Integración, Erik Ullenhag, cuando fue publicado, el 2014.

- Déjeme pensar y ver que se puede hacer. En este momento yo no puedo tomar una decisión así, ¿ok?, fue la respuesta de Plumb.

Pero las críticas a sus declaraciones no tardaron en llegar.

"Al parecer ahí y entonces quedó al descubierto la raíz del problema del porqué miles de romaníes rumanos mendigan en las calles de toda Suecia en pleno invierno…/…O, mejor dicho, la raíz ha sido expuesta desde hace mucho tiempo, pero se mostró una vez más a través de Rovana Plumb, quien solamente repitió lo que su jefe, el Primer Ministro, Victor Ponta, y muchos otros ya han dicho anteriormente", escribió la comentarista política de Aftonbladet, Lena Mellin.

 

Fred Taikon, presidente de la asociación romaní É Romani Glinda calificó la declaración de la ministra Plumb de "tontería".

- En Rumania se discrimina abiertamente a los romaníes, dijo Taikon al matutino Svenska Dagbladet.

Taikon agregó que le parecía muy raro que distintos ministros rumanos en sus visitas a Suecia negaran consecuentemente este hecho.

Según él, la razón por la cual Rovana Plumb tampoco reconoce este problema es que ella "no es una política, sino más bien una ministra que quiere defender su posición. Si ella hubiera sido una verdadera política, habría dicho que este es un problema con el cual vamos a trabajar", dijo Fred Taikon al periódico.

- Deberían haber entendido que en Suecia se debate el tema de los emigrantes de la UE. El decir que la discriminación no existe es una completa mentira, agregó.

 

"Deben dejar de mentir"

Sven Hovmöller es profesor de Química y político socialdemócrata del municipio de Sollentuna. Él colabora con la organización sin fines de lucro, HEM, la cual ayuda a los migrantes europeos que no tienen vivienda en Estocolmo. "Ellos viven en una miseria enorme. Hay tanto que se puede hacer por ellos", dice Hovmöller en Aftonbladet.

Para el vespertino explicó que desde hace un año trabaja a tiempo completo en la organización, dando clases de sueco y consiguiendo asistencia médica, entre otras cosas.

Según Hovmöller, la situación de la comunidad romaní es sumamente compleja, ya que ellos han vivido en un sistema de apartheid en Rumania y en Bulgaria durante mucho más tiempo que el apartheid de Sudáfrica: por más de mil años. "Con dos millones al borde de la inanición en Rumania este es un problema que no va a desaparecer", dijo al vespertino.

Él considera que está bien que los romaníes vengan a Suecia, ya que entonces se visibiliza su situación. Pero opina que el gobierno sueco debe presionar más a Rumania.

- Deben dejar de mentir. Ellos dicen que los romaníes en Rumania tienen acceso a la educación y a la salud, pero eso no es cierto. No he conocido a ninguno aquí, en las calles, que tenga una tarjeta azul, que se requiere para obtener atención médica en Rumania. Y muchos son - a pesar de ser de mediana edad, de inteligencia normal e interesados en aprender - analfabetos. Allí el sistema es tan corrupto, que no se consigue atención médica, cuidado dental o educación sin que se tenga que sobornar por ello, concluyó Hovmöller, en Aftonbladet.

Y no es el único que exige más presión de parte del gobierno sueco respecto al gobierno rumano, para que este tome la responsabilidad que le corresponde respecto a sus ciudadanos.

La ministra Åsa Regner, por su parte, informó el viernes que el gobierno ha decidido designar a un coordinador nacional que entrará en funciones en el plazo de una semana y que será un complemento a la cooperación sueca-rumana.

Respecto a las declaraciones de Plumb, Regner no quiso entrar en detalles, pero expresó que: "sabemos que los romaníes tienen una larga historia de discriminación en todos los países de la Unión Europea".

 


 

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