09 de septiembre de 2014 | SUECIA - ELECCIONES 2014 |
Gran preocupación por caos en el Parlamento
La confusión es grande ante la incertidumbre de cómo será gobernada Suecia después de las elecciones del 14 de septiembre si ninguno de los bloques obtiene mayoría propia.
Tanto el Primer Ministro Fredrik Reinfeldt, como el líder Socialdemócrata Stefan Löfven alertan de un caos parlamentario.
Lena Hennel, del matutino Svenska Dagbladet, explica los conceptos sobre lo que sucedería si los Demócratas de Suecia fuesen el contrapeso de la balanza.
Fuente: SvD. 19-08-2014. Lena Hennel. Traducción: Magazín Latino
Opción 1. Reinfeldt trata de mantenerse en el poder. Ocurre una situación no clara, ningún bloque obtiene mayoría propia. Los Demócratas de Suecia son el contrapeso de la balanza y los Rojiverdes tienen mayor apoyo que la Alianza en su totalidad. Fredrik Reinfeldt puede de todas maneras escoger tratar de mantenerse. Entonces, según las nuevas regulaciones de la constitución, debe ser llevado a votación a más tardar dos semanas después de la apertura del nuevo parlamento.
Para forzar la salida de un Primer Ministro es necesario que una mayoría de los parlamentarios, 175, voten en contra de él. Si muchos partidos se abstienen de votar, puede un número menor de votos apoyándolo, ser suficiente para que se mantenga en su puesto.
El Presidente del Sindicato de Trabajadores, LO, Karl-Petter Thorwaldsson, explicó el viernes que está convencido de que ocurrirá justamente esto. Fredrik Reinfeldt intentará mantenerse en su puesto incluso si los Rojiverdes son más grandes: "Es demasiado tentador el continuar gobernando", dijo.
Opción 2. El gobierno de Reinfeldt se retira. El Primer Ministro Fredrik Reinfeldt declaró anteriormente que él renunciaría si el bloque Rojiverde obtiene más votos que la Alianza. Si mantiene su posición, es probable que ya la noche de las elecciones comunique su renuncia como jefe de gobierno.
Tan pronto como entregue su renuncia, es relevado de su cargo por el Presidente del parlamento, el Moderado Per Westberg, cuya tarea es inmediatamente comenzar a sondear el terreno para un nuevo gobierno. El Presidente del Parlamento habla con todos los partidos representados en el
parlamento. La primera solicitud de formar gobierno probablemente vaya al Socialdemócrata Stefan Löfven, como líder del partido más grande. Stefan Löfven explica que su primera alternativa es gobernar junto con el partido Verde (MP), pero tanto el partido de Izquierda (V) como el Partido del Centro © son potenciales partes.
Si el líder Socialdemócrata fallase en formar un gobierno, el Presidente del parlamento retoma el sondeo. El presidente tiene cuatro intentos de tratar de que se forme un gobierno: después debe llamar a elecciones extraordinarias en el lapso de tres meses.
Opción 3. Se crea un nuevo gobierno. Cuando esté claro como se vería un nuevo gobierno, como de costumbre se elige por votación al Primer Ministro. De la misma forma que con las nuevas reglas (que son aplicables al Primer Ministro gobernante) se trata de un nuevo Primer Ministro no puede tener una mayoría en su contra, lo así llamado parlamentarismo negativo. En teoría un primer ministro no necesita tener ningún apoyo en el parlamento.
En la práctica sin embargo es obvio que por lo menos su propio partido vota por su líder.
El ejemplo más elocuente es la crisis del gobierno burgués de 1978. El líder del partido Liberal, Ola Ullsten, logró formar un gobierno unipartidista con solo el apoyo de los 39 parlamentarios de su partido. Los Moderados y el partido de Izquierda con un total de 66 parlamentarios votaron en su contra, pero como la Socialdemocracia y el partido del Centro se abstuvieron de votar (215 ), Ola Ullsten fue elegido primer ministro.
Un gobierno con tan poco apoyo político activo en el parlamento, tiene grandes dificultades en gobernar.
Opción 4. Un nuevo gobierno gobierna. La actual ley presupuestaria fue legislada para crear una estabilidad parlamentaria. Facilitar que un gobierno lleve a cabo su política económica. Para poder tumbar un presupuesto es necesario que otro presupuesto alternativo logre obtener mayor apoyo en el parlamento. Es una de las razones que el actual gobierno de la Alianza ha podido llevar a cabo su política económica a pesar que no tiene mayoría propia en el parlamento.
Un hecho complicado es sin embargo, la pelea sobre el incremento del límite para pagar impuesto estatal, el invierno del 2013. Entonces los Rojiverdes votaron junto con los Demócratas de Suecia en contra de la propuesta de la Alianza, a pesar que formaba parte del presupuesto.
Los partidos de gobierno argumentaron en vano que las reglas presupuestarias, la praxis y las normas parlamentarias significan que el parlamento no puede escoger parte de una propuesta de presupuesto ya aprobado. La oposición dijo por su parte, que sí era válido hacerlo ya que no significaba un debilitamiento del presupuesto decir no a una reducción de impuestos. Este altercado arriesga tener consecuencias también para el próximo gobierno. Si se considera que se puede libremente cuestionar partes de un presupuesto, puede llegar a influir en la capacidad de
gobernar.
Pero no es sólo el presupuesto que puede ser problemático. Un débil gobierno de minoría arriesga a perder un número de votaciones en el parlamento; algo que la Alianza ha experimentado.
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