31 de diciembre de 2011 | COLUMNA |
Una incógnita para el 2012
Por: Lilian Aliaga
Una buena e importante noticia aparece en Chile al finalizar un año difícil, marcado por un largo conflicto estudiantil y múltiples protestas sociales:
La ley que garantiza la inscripción electoral automática y el voto voluntario, promesa de campaña del presidente Piñera, está lista para su promulgación en el mes de Enero próximo, luego de ser aprobado el proyecto, en el Senado.
Como regalo navideño llegó a su etapa final este proyecto de ley que da automáticamente a todo ciudadano mayor de 18 años la posibilidad de participar en la elección de sus autoridades, sin tener que hacer el trámite de inscripción en el registro electoral como era hasta ahora, y que aunque sencillo, significaba una barrera para que muchos participasen en ellas.
Aunque la obligatoriedad o no obligatoriedad del voto, sigue siendo tema de controversia y de opiniones contrapuestas, la mayoría coincide en que este cambio es tan significativo como la incorporación del voto femenino en el año 1950. Con él, por otra parte, se abre una tremenda incógnita para el año 2012, dado que significa la incorporación de 4.500.000 nuevos potenciales electores, principalmente jóvenes. Si todos ellos tuviesen la disposición de participar, emitiendo sus votos en las próximas elecciones, realmente podrían cambiar absolutamente el paisaje político de nuestro país.
Así, Chile enfrenta este nuevo año con un gran desafío, el de aprovechar esta histórica oportunidad de ejercer libremente un derecho sin la presión del castigo, de participar en la elección de autoridades por convicción, por responsabilidad, por conciencia cívica. Siempre la libertad conlleva un grado equivalente de responsabilidad y esto es lo que entra en juego desde noviembre del 2012, cuando se realice de acuerdo al nuevo sistema, la elección de autoridades municipales, esto es: alcaldes y concejales.
Para todos, políticos y ciudadanos comunes es una gran interrogante lo que ocurra, aunque para los primeros, la tarea que se viene es mucho más ardua: motivar y convencer electores que "se tomen la molestia" de ir a entregar su voto,( muchos lo hacían solo por no pagar las multas que implicaba el no votar).
Creo que ésta será una buena inyección de vitalidad, de aire fresco para nuestro aletargado ambiente electoral, era odioso escuchar cada día de elecciones a las autoridades de turno jactarse de - lo bien que se ha desarrollado el proceso electoral -, - los chilenos han dado ejemplo de responsabilidad y educación cívica- y otras frases cliché como esas. ¿Y cómo no? me preguntaba yo, si no quedaba otra, era ir a votar o ser notificado de una fuerte multa. Así, ¡quien no participa!
Así pues, las próximas serán creo yo, las más entretenidas y poco previsibles elecciones en muchos años. Ojalá los jóvenes, los indignados y todos los que protestan por las más diversas y justas causas y que hasta ahora no se han sentido representados por las autoridades, ejerzan este derecho de la manera más sabia y responsable y entre todos podamos ser un factor concreto en la provocación de los cambios necesarios para llegar a tener un país en el cual no tengamos que cargar con la tremenda vergüenza de estar entre los primeros en el mundo, en desigualdad social.
Por ello este fin de año quiero brindar junto a todos los amigos de Magazín Latino, por la esperanza de tener un país y un mundo más justo y también, porque las próximas modificaciones en nuestro sistema electoral, sean el término del odioso sistema binominal que permite dejar fuera de un cargo a muchos candidatos con mayor votación que los que son electos, y porque se cumpla el anhelo de muchos compatriotas que por diversas razones viven en otros países, pero a quienes igualmente les interesa lo que aquí ocurre: participación en el proceso electoral de los chilenos residentes en el extranjero.
¡¡¡¡¡ SALUD Y ESPERANZA DE TIEMPOS MEJORES PARA TODOS !!!!!
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